El Lobo no está

Por motivos laborales que a nadie le interesan, este año no había tenido la posibilidad de ir a ver al Lobo. Anoche por fin se dio la oportunidad, así que fui, aunque es verdad que también acudí a ver a mi coterráneo Lucas Bianco, alero de Italiana de Charata.

En el primer tiempo el Gimnasia defendió fuerte, pudo correr el contrataque y basó su ofensiva en el juego interior para Johnson y Ojeda. Los chaqueños se vieron superados y se los notó muy fastidiosos consigo mismos.

Pero todo cambió en el segundo tiempo y ahí se vio por qué, desgraciadamente, el equipo platense es uno de los principales candidatos al descenso: se dejó pasar por arriba por un Italiana renovado y en ataque mostró falencias increíbles, como la falta de un tirador que descomprima el juego para los internos y la falta de un Plan B cuando no se puede correr. Asimismo, el técnico se demoró en pedir minuto y en un rato del tercer cuarto se desmoronó todo lo que se había hecho hasta el momento.

Italiana creció en esa segunda etapa en base a una defensa con dobles marcas para Jonhson y un ataque basado en los tiros externos de Canteros y la versatilidad de Miller. Con estos simples argumentos, el equipo de Charata se llevo una victoria de La Plata y hundió aún más un Lobo que deberá luchar con Española, Argentino de Junín, Regatas y Olimpia Catamarca para evitar descender por segundo año consecutivo.

Para remarcar, el flojo desempeño de los árbitros, que enojó a unos y otros. No hay criterios comunes, se cobran foules sin sentido cuando una jugada antes se golpearon y no pitaron, la verdad que ese es un ascpecto a mejorar, si lo que se quiere es la excelencia de nuestra competición.